El dolor es un mecanismo de nuestro cuerpo que nos indica que algo no está bien y que tenemos que prestar atención a esta zona para curarla. El dolor puede tener diferentes intensidades, desde un leve golpe hasta un intenso dolor que nos paraliza, y que puede convertirse en miedo en ciertos casos.

¿Qué es el dolor?

Antes de responder a la pregunta de por qué tenemos miedo al dolor, es importante entender qué es el dolor.

Según la Asociación Internacional para el Estudio del Dolor, el dolor es “una experiencia sensitiva y emocional desagradable, asociada a una lesión tisular real o potencial”.

Es el resultado de una estimulación de las terminaciones nerviosas sensitivas de una zona del cuerpo para alertar de una inflamación, enfermedad o problema.

Existen diferentes tipos de dolor. Puede sentirse como un pinchazo, un hormigueo, una picadura o una molestia. Puede ser agudo o sordo, intermitente o constante.

¿Por qué tenemos miedo al dolor?

Aunque el dolor sea una reacción fisiológica de nuestro organismo a un problema, siendo algo completamente normal, éste puede convertirse en un problema cuando genera en la persona ansiedad o miedo.

Es algo que vemos a menudo en SedNa, Sedación Consciente en Navarra, en las clínicas dentales. La odontofobia, o miedo al dentista, encuentra su origen en malas experiencias vividas en el pasado, donde un paciente sintió un dolor que no podía soportar, creando un bloqueo, que hace que no vuelva al dentista para su revisión anual.

Este miedo a sufrir se puede convertir en algofobio, en los casos más graves.

Tener miedo al dolor es normal, ya que, una vez que lo hemos sentido, nuestra reacción natural es no querer volver a sentir este dolor. El miedo es la forma que tiene nuestro cerebro de anticipar situaciones amenazantes o peligrosas, para evitarlas.

Entonces, como ocurre con la odontofobia, el saber que uno va a sentir dolor yendo al dentista a curarse una caries, esta situación genera en algunas personas un miedo anticipado que deriva en ansiedad o ataques de pánico. Y, por consecuencia, provoca que la persona evite este dolor, en detrimento de su salud.

Sedación consciente como solución al miedo al dolor

Algunas personas lograrán controlar su miedo al dolor, mientras que otras sentirán estrés, ansiedad, pánico y desarrollarán fobias paralizantes que les impedirá cuidar correctamente su salud.

Es por este motivo que se usa cada vez más sedaciones conscientes, como las que realizamos en SedNa, para tranquilizar las personas con odontofobia o algofobia, y que se sometan así al procedimiento médico indicado.

¿Te reconoces en esta situación de miedo al dolor?

Si el miedo al dolor te provoca ansiedad y te impide acudir al dentista o realizarte pruebas clínicas como gastroscopias y colonoscopias, ponte en contacto con SedNa. Estudiaremos tu caso para elegir la sedación más adecuada y contactar con tu profesional de la salud para acompañarte el día de la prueba o intervención.